Artículo destacado:

  • Destinos icónicos como la Gran Barrera de Coral, el Taj Mahal y Machu Picchu están desapareciendo.
  • El turismo proporciona un apoyo económico vital a las comunidades, ofreciendo medios de subsistencia e incentivos para proteger los recursos naturales y culturales.
  • Nuevos destinos, como Eslovenia, Laos y Madagascar, surgen como alternativas a lugares excesivamente turísticos.
  • Viajar de forma responsable puede ayudar a preservar destinos y atracciones en peligro para las generaciones futuras.

 

Algunos de los destinos turísticos más emblemáticos del mundo están desapareciendo, desde la desaparición de las nieves del Kilimanjaro y el coral blanqueado de la Gran Barrera de Coral hasta el hundimiento de la ciudad de Venecia y el vandalismo de la Gran Muralla China. El turismo excesivo, la contaminación y el abandono conducen a estos lugares hacia la extinción.

Viajar a destinos de riesgo puede ser beneficioso o perjudicial, dependiendo de cómo se equilibren los beneficios económicos con los esfuerzos por preservar el lugar. Para muchas comunidades de todo el mundo, el turismo es algo más que una industria del ocio: es una fuente esencial de ingresos, empleo y oportunidades.

En estas regiones, el sustento de la población local depende a menudo del flujo constante de visitantes. El turismo puede ayudar a financiar infraestructuras y crear poderosos incentivos económicos para preservar el patrimonio natural y cultural. Desde las aldeas costeras de Centroamérica hasta las remotas comunidades montañosas de África, el turismo ha animado a la población local a proteger los recursos que atraen a los viajeros en primer lugar. Viajar, cuando se hace de forma responsable, puede ser un salvavidas.

 

Glaciares

El Parque Nacional de los Glaciares, en Montana, llegó a tener 150 glaciares. Hoy quedan menos de 30. El aumento de las temperaturas los está derritiendo, cambiando para siempre el ecosistema del parque. Los glaciares de la Patagonia, a caballo entre Chile y Argentina, están retrocediendo rápidamente, una consecuencia visible y dramática de las tendencias al calentamiento.

El glaciar Franz Josef de Nueva Zelanda está retrocediendo rápidamente. Antes era fácilmente accesible, pero ahora hay que ir en helicóptero, lo que cambia la experiencia del visitante. La Antártida, la última gran reserva natural, se está calentando más rápidamente que ningún otro continente. El deshielo de las capas de hielo amenaza el nivel del mar y el hábitat de innumerables especies. El glaciar Athabasca, en Canadá, un lugar turístico muy popular, se está reduciendo visiblemente cada año, sirviendo de dramático recordatorio de un mundo que se calienta.

 

Decoloración de los arrecifes de coral, socavones y crecida de los cursos de agua

La Gran Barrera de Coral ha perdido más de la mitad de su cubierta coralina en las últimas décadas debido al calentamiento de los mares y la acidificación de los océanos. Antaño repletas de color y vida, grandes franjas son ahora de un blanco fantasmal debido a los fenómenos de blanqueamiento masivo. El Mar Muerto se está reduciendo drásticamente. Conocido por sus aguas curativas y su lodo rico en minerales, el Mar Muerto ha perdido más de un metro de agua al año debido a la desviación del agua y a los cambios de temperatura, formando peligrosos sumideros en la región.

Seychelles, un archipiélago paradisíaco, está perdiendo sus playas por la subida del nivel del mar y la desaparición de los corales, lo que amenaza la vida marina y el turismo. Las Maldivas, famosas por sus playas de arena blanca y sus bungalows sobre el agua, se enfrentan a amenazas existenciales. El aumento del nivel del mar y la decoloración del coral ponen en peligro su supervivencia, y las proyecciones advierten de que el país podría quedar sumergido a finales de siglo.

 

Venecia, Machu Picchu y el Taj Mahal

Venecia, la romántica ciudad flotante, se hunde bajo su peso, literalmente. La subida de las mareas, el turismo excesivo y las deficientes infraestructuras han hecho que las inundaciones sean más frecuentes y graves. El Taj Mahal, el monumento más famoso de la India, sufre decoloración y daños estructurales debido a la contaminación y el turismo excesivo. Se están tomando medidas, pero sigue habiendo problemas. Machu Picchu, la antigua ciudadela inca de Perú, se está desmoronando bajo el peso de demasiados visitantes. La erosión y la inestabilidad estructural son cada vez más preocupantes.

La Gran Muralla China está siendo erosionada y vandalizada. Alrededor de dos tercios de la muralla están dañados o han desaparecido por completo. La Necrópolis de Giza, en Egipto, sufre la contaminación, el saqueo y los impactos del desarrollo urbano cercano, poniendo en peligro estas maravillas antiguas. Los Budas de Bamiyán, en Afganistán, fueron trágicamente destruidos, un recordatorio de que el patrimonio cultural, al igual que las maravillas naturales, puede perderse para siempre. La Ventana Azul de Malta, un arco de piedra natural, se derrumbó al mar en 2017. Es un crudo ejemplo de cómo las maravillas geológicas pueden estar aquí hoy y desaparecer mañana.

 

Selvas tropicales

La cuenca del Congo, la segunda selva tropical más grande del mundo, se está degradando rápidamente. La deforestación y la minería ilegal están erosionando este foco de biodiversidad. La selva amazónica, el «pulmón del planeta», está siendo talada a un ritmo alarmante para la agricultura y la explotación forestal. Su rica biodiversidad y sus culturas indígenas están amenazadas. Los Everglades de Florida están siendo desecados y contaminados. La pérdida de este ecosistema de humedales tendría efectos devastadores en la biodiversidad regional.

 

Montañas

El emblemático manto de nieve del Kilimanjaro está desapareciendo. Los científicos calculan que el hielo podría desaparecer en unas décadas debido a los cambios de temperatura y la deforestación. Los Alpes, el patio de recreo invernal de Europa, están experimentando temporadas de esquí más cortas y retrocesos de los glaciares debido al aumento de las temperaturas.

 

Fauna insular

Las islas Galápagos, hogar de especies raras y endémicas, están en peligro por las especies invasoras y el turismo mal gestionado. A pesar de la estricta normativa, la presión va en aumento. La isla de Komodo, hogar del dragón de Komodo, está amenazada por el turismo excesivo y la destrucción de su hábitat. Los esfuerzos de conservación restringen ahora el acceso para proteger la especie.

 

¿Están surgiendo nuevos destinos?

Mientras algunos destinos se desvanecen, otros se alzan como puntos calientes del ecoturismo. Eslovenia es aclamada por su compromiso con los viajes verdes, con lagos vírgenes, alojamientos ecológicos y gastronomía de la granja a la mesa. Laos ofrece turismo comunitario en paisajes serenos y vírgenes. Panamá combina selvas tropicales y culturas indígenas con crecientes iniciativas de conservación.

Madagascar, con sus especies y ecosistemas únicos, se enfrenta a una deforestación masiva. Afortunadamente, también se está convirtiendo en un destino ecoturístico que promueve la conservación con alojamientos ecológicos en expansión y opciones de viaje sostenibles que apoyan su biodiversidad única.

 

Cómo pueden ayudar los viajeros

Global Rescue y sus socios, como Re:wild y &Beyond, demuestran cómo coexisten los viajes y la conservación. Estas organizaciones dan prioridad a los viajes seguros y responsables que apoyan la protección del medio ambiente.

Dan Richards, director general de The Global Rescue Companies y miembro del Consejo Asesor de Viajes y Turismo de Estados Unidos, afirma: «Los gobiernos pueden establecer límites de visitantes, promover los viajes fuera de temporada alta e invertir en infraestructuras turísticas sostenibles para preservar estos destinos para las generaciones futuras. Los viajeros pueden contribuir buscando lugares menos conocidos, viajando en temporada baja y adoptando prácticas de turismo responsable.»

Cada viajero tiene el poder de crear un cambio positivo a través del ecoturismo. Tomando decisiones de viaje conscientes, podemos preservar la belleza y la diversidad de nuestro planeta para las generaciones futuras.