Mientras estaba de vacaciones en Alemania con su familia, uno de sus miembros intentaba subir a un tren cuando cayó en el hueco entre el tren y el andén, lacerándose gravemente una pierna. Poco después del incidente, su hijo se puso en contacto con Global Rescue.

Tras la llamada inicial, los médicos locales llegaron al lugar y trasladaron al miembro a un hospital cercano, donde los facultativos intentaron controlar la hemorragia y realizaron una radiografía. En una primera revisión, el personal médico local de Alemania consideró que la situación era estable y que no había indicios de fracturas o lesiones más allá de la laceración.

Tras revisar la lesión con los médicos locales, se decidió que lo mejor sería que el miembro permaneciera en Alemania otros 5 días para determinar si la pierna estaba estable para el transporte y si sería necesario un injerto de piel. A continuación, el miembro podría ser trasladado a su hospital de origen en Houston para recibir tratamiento adicional.

Global Rescue tomó medidas para garantizar que el miembro permaneciera cómodo en el hospital y se puso en contacto con su esposa, que ayudó a obtener la entrega de los historiales médicos pertinentes. Esto permitió a los equipos médicos de Global Rescue comprender mejor si se estaba recibiendo la atención adecuada y cuáles debían ser los siguientes pasos en el proceso de tratamiento.

Como consecuencia de la prolongación de la estancia y para controlar al paciente durante el transporte, Global Rescue envió personal médico a Alemania, que se reunió con el herido y su esposa en el hospital, organizó su alta y supervisó su transporte.

Una vez en tierra en Houston, Global Rescue organizó el transporte terrestre del miembro desde el aeropuerto hasta Urgencias en el hospital receptor.

Tras una evaluación y diagnóstico en urgencias, se determinó que la lesión del afiliado se estaba curando bien y la situación no requería un nuevo ingreso hospitalario.