El 17 de julio, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró emergencia sanitaria mundial el brote de ébola que se está produciendo en la República Democrática del Congo (RDC). La declaración oficial, conocida como «emergencia de salud pública de importancia internacional», se emitió para aumentar la atención internacional y ayudar a detener la propagación del virus a otros países.

Hasta el 15 de julio, al menos 1.676 de los 2.512 casos de ébola registrados en el brote habían resultado mortales. Los informes también indican que, aparte de los incidentes confirmados en Uganda, la mayoría de los casos de ébola registrados siguen concentrados en las provincias orientales de Kivu del Norte e Ituri, en la RDC.

También el 17 de julio, la OMS advirtió de la posible propagación del virus del Ébola en la región occidental de Uganda.

Según los medios de comunicación locales, la advertencia se produjo después de que una pescadora congoleña muriera por el virus del Ébola tras regresar a la RDC de su viaje al mercado de Mpondwe, en la región occidental de Uganda, el 11 de julio. Los informes indican que la víctima sufrió cuatro vómitos durante su estancia en el mercado de Mpondwe.

Al parecer, las autoridades sanitarias están vigilando al menos a otros 19 pescaderos que figuraban como posibles contactos en el incidente, y otros 590 podrían ser objeto de vacunación.

Hasta el 17 de julio no se había detectado en Uganda ningún caso positivo del virus del Ébola.

Análisis
El actual brote de ébola es el segundo mayor de la historia, tras el que se declaró en África Occidental en 2014-15. Según los informes, el brote anterior, que también se declaró como emergencia mundial, infectó al menos a 28.616 personas y causó 11.310 muertes.

El brote se considera más grave en las ciudades de Beni, Butembo, Kalunguta y Mabalako, en la provincia de Kivu Norte. En Ituri, la mayoría de las víctimas mortales y los casos confirmados relacionados con el ébola se registraron en Mandima y Komanda.

El 14 de julio, las autoridades sanitarias anunciaron el primer caso confirmado del virus del Ébola en Goma, ciudad de la RDC de dos millones de habitantes. El paciente contrajo el virus cuando visitó e interactuó con enfermos de ébola en Butembo.

El Ministerio de Sanidad del país indicó que el riesgo de propagación del virus a toda la ciudad, fronteriza con Ruanda, sigue siendo bajo después de que el personal sanitario identificara inmediatamente a las personas que posiblemente estuvieron expuestas o habían interactuado con el citado paciente.

Tres personas han muerto a causa del brote de ébola en Uganda. Las tres víctimas mortales eran miembros de la familia que cruzó a Uganda desde la RDC el 9 de junio y a la que posteriormente se diagnosticó ébola.

El 11 de junio, las autoridades sanitarias confirmaron que un niño congoleño, uno de los miembros de la familia mencionada, había contraído la enfermedad. El niño fue tratado inicialmente en el hospital de Kagando antes de ser trasladado a una unidad de tratamiento del ébola en Bwera, pero posteriormente falleció el 12 de junio. El 13 de junio también murió la abuela del niño.

La confirmación del 11 de junio fue el primer caso conocido del virus del Ébola en Uganda en medio de un brote en curso en la RDC. Uganda se ha enfrentado a brotes de ébola en el pasado, el más reciente en 2012, y ha aplicado medidas tras el brote en la vecina RDC.

Las autoridades ugandesas ya han vacunado a unos 4.700 trabajadores sanitarios y han establecido centros de detección del ébola a lo largo de la frontera con la RDC. Las autoridades también han identificado 22 distritos de alto riesgo a lo largo de la frontera y han enviado monitores a estas zonas para identificar posibles casos.

El virus del Ébola es muy contagioso y a menudo mortal. El personal sanitario y las personas que han estado en contacto con pacientes de ébola están siendo vacunados en un esfuerzo por controlar la propagación del virus.

La transmisión puede producirse incluso a través del contacto con personas o animales fallecidos. Los síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza, diarrea, vómitos y hemorragias internas y externas.

Consejo
Aunque los trabajadores de hospitales, laboratorios y familiares son los que corren un mayor riesgo de contraer el virus, las personas que viajen a países afectados por el Ébola deben adoptar precauciones sanitarias básicas, entre ellas:

  • Evite las zonas con brotes conocidos.
  • Evite el contacto con personas infectadas.
  • Durante los viajes a zonas endémicas, debe observarse una higiene personal estricta, incluido el lavado frecuente de las manos.
  • Informe inmediatamente de cualquier síntoma a las autoridades sanitarias.

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